LOS ENAJENADOS CELEBRARON EL DIA DEL NIÑO, EL JUGUETE Y LA VELOCIDAD

No solamente se trata de divertirse en las carreteras, sino de transmitir momentos especiales con los pequeños en estas fiestas de fin de año.

Los integrantes de los Enajeados Racing Club se organizaron para brindar alegría a los niños de los hogares Esperanza para Guatemala, Santa Faz, Mamá Carmen, Go Guatemala y Ana Win que fueron los hogares privilegiados en compartir en esta actividad.

La cita fue el pasado domingo 11 de diciembre en las instalaciones del Parque Erick Barrondo a las 9 de la mañana.  Gracias al apoyo de la empresa de transporte Galgos, los más de 380 niños fueron trasladados para compartir este momento que sería inolvidable.

Al momento de llegar los niños fueron recibidos con mucha alegría y entusiasmo. Luego de las palabras de bienvenida, les entregaron una refacción a cada niño para comenzar bien el día. Mientras los niños disfrutaban y comían, se hizo la entrada oficial de las poderosas motocicletas tipo Racing que rugieron los motores a su entrada por lo que los infantes aplaudieron y se emocionaron aún más cuando vieron a Santa Claus en motocicleta, ya que por supuesto, Santa también vive la Pasión por las Motos.

Además, se les tenía preparado un show espectacular de BMX Freestyle en donde los ciclistas hicieron sus mejores trucos y recibieron a cambio la admiración y los aplausos de los niños presentes.

Luego, los invitados tuvieron la oportunidad de dar un paseo en las motocicletas de los integrantes de los Enajenados Racing Club que condujeron a una velocidad moderada, muchos pequeños ya no se querían bajar así que pidieron doble vuelta, y de esta manera disfrutaron y compartieron la emoción de andar sobre las dos ruedas.  Además se hizo entrega de un reconocimiento muy especial a Otto Coloma, Presidente del Motoclub, por ser un Enajenado Distinguido.

La actividad  cerró con broche de oro, que fue la quiebra de las piñatas, así que organizaron a los niños en grupos para que todos tuvieran la oportunidad de quebrarlas y recoger los tan anhelados dulces.

El hambre se hizo presente, pero los Enajenados tenían todo preparado, por lo que les compartieron una porción de pizza, pastel y gaseosa. La actividad concluyó con la entrega de un regalo muy especial a cada niño.  Así que este día fue muy divertido e inolvidable para cada uno de los pequeños que atesorará este recuerdo como uno de los más lindos para esta Navidad.